Revistiendo la pared íntegramente de vidrio lacado negro, se creó una composición con cubos retroiluminados de vidrio extraclaro, ingletados en los cantos, para lograr una unión limpia y perfecta. Estos cubos tienen como finalidad la colocación de los libros que componen la biblioteca, creando envolventes y elegantes sensaciones, que hacen del espacio algo puro y a la vez sencillo.
El vidrio como protagonista, acompañado de la transparencia y la luz difusa como esencia del espacio.•
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